Democracia Corinthiana

Camiseta Democracia Corinthiana

La camiseta de un carismático jugador

Hubo una época en Brasil, no tan lejana en el tiempo, en la que los militares mandaban mucho y no tenían mayor recato en emplear la violencia en sus formas más expeditivas ante cualquier brote de contestación popular.

Por esas mismas fechas, destacaba en Sao Paulo un club de fútbol como el Corinthians, capitaneado por el mítico Sócrates Sampaio de Souza, que también nació en Belén y aparte de las barbas tuvo el valor de plantar cara al statu quo represivo del momento. ¿Les suena la historia? Pues si el otro sanaba a los enfermos, Sócrates se sacó la carrera de médico.

Con el respaldo de una plantilla de jugadores muy comprometida con la realidad social que vivía el país, lideraron el movimiento Democracia Corinthiana que puso en más de un aprieto a las autoridades locales.

Aprovechando el desarrollo de la Eurocopa de Francia, El Tomoscopio de Mimbre quiere honrar en la figura del «doctor Sócrates» a todos aquellos que con su compromiso allanaron el camino para que una democracia en Brasil fuera posible. Al menos algo.

Quede aquí reseña de cómo homenajearon al jugador el día de su temprano fallecimiento.

Ricardo Zamora y la cesta-punta

ricardo zamora

¡Mira por donde no era una batallita del abuelo!

En ocasiones mi abuelo Joaquín destapaba el frasco de las esencias, escapando por su boca alguna que otra anécdota de su trayectoria como pelotari. La que hoy me viene a la memoria es una en la que me contaba cómo Ricardo Zamora, el mítico portero de la selección española de fútbol, y por aquel entonces enrolado en las filas del Español de Barcelona, se acercaba de vez en cuando al frontón donde entrenaba mi abuelo para dar unos cestazos contra la pared junto a ellos.

Debo reconocer que no siempre daba máxima credibilidad a esos relatos aunque me divertía mucho escuchándolos. La sorpresa me la llevé un día que llegó hasta mí una fotografía de la época en la que el guardameta aparecía con una cesta enfundada en su mano derecha.

Se ve que el tiempo del selfie aún no había llegado, si no estoy convencido de que hoy podría ofrecerles una instantánea de mi abuelo junto a esa gloria futbolística y se hubiera dado cuenta de ello en El Tomoscopio de Mimbre.

El patrón alado de Venecia en Sevilla

San Marco Cuna Sevilla

Un lugar con encanto

La calle Cuna de Sevilla fue testigo durante muchos años del buen hacer gastronómico de un restaurante que respondía al nombre de San Marco. Justo en el lugar ocupado por la antigua caballeriza de una casa señorial del siglo XVII, este local destacaba por su decoración con tintes de palacio veneciano y por lo acogedor del trato por parte de su personal.

Lo que probablemente pocos sevillanos supieran es que la familia que puso en pie este restaurante, y otros tres, era de Tánger. A estas alturas del blog a nadie debe extrañarle que un tangerino pueda tener apellido italiano. Gajes del cosmopolitismo. Por eso el local y esta familia aparecen nombrados en El Tomoscopio de Mimbre.

Un día de Septiembre de 2012 este selecto restaurante cerró sus puertas y nos dejó algo huérfanos a sus incondicionales aunque siempre nos quedarán… el de la calle Santo Domingo de la Calzada y el del barrio de SantaCruz. Eso sí, nunca será lo mismo.

En Eibar, el lunes, no era día aciago

Frontón Astelena de Eibar

La Catedral de la pelota a mano

Siempre que se habla de La Catedral, inmediatamente nos viene a la memoria el estadio de San Mamés en Bilbao. Pero no todo es fútbol en esta vida. La pelota vasca tiene también sus templos.

La «otra» Catedral, que tiene su ubicación en la localidad guipuzcoana de Eibar, es el frontón Astelena inaugurado, cómo no, un 24 de junio (como el otro día, ¡Felices San Juanes!) de 1904 en formato descubierto. Al poco tiempo se procedió a su cubrimiento y desde entonces, salvo por la guerra civil o su cierre por dos años en 2005, acogió grandes festivales de pelota a mano.

Este Astelena, en euskera lunes, recibe ese nombre por una curiosa escaqueada que se producía a mitad de jornada en las fábricas y talleres cuando se corría la voz de la celebración de algún partido de pelota en el frontón de la localidad.

Fue muy emocionante la primera vez que entré en él acompañado de mi abuelo, el pelotari Joaquín Gimeno Quintana,  en 1981, y por eso aparece recogido en El Tomoscopio de Mimbre como homenaje a éste.

Les dejo con un curioso vídeo filmado en las instalaciones de este frontón, recientemente aggiornado, con motivo de un concierto de Rosendo en 2011.

La cesta busca su renacimiento en los EEUU

Auténticos atletas

Como ya se comentó en entradas pasadas de este blog, la famosa huelga de pelotaris de 1988 acabó dando la puntilla a una práctica deportiva muy extendida y lucrativa en un país que sigue pirrándose por apostar a todo lo que se mueva. Cierto es que las condiciones laborales de estos «héroes» se degradaron de tal manera (visados amenaza, seguros de enfermedad, jubilación, etc…) que hicieron estallar el conflicto.

Desde 2017, este país asiste a un «quiero y no puedo» de la actividad puntista en ciertos complejos compuestos por casinos y hoteles del estado de Florida. Pero la cosa no ha terminado bien, cerrándose el último que mantenía la actividad: Dania. En paralelo, el casino Magic City apostó fuerte a pesar de los problemas para reclutar pelotaris extranjeros (ya se sabe que Trump hizo política con la inmigración) y de la mano de Universidad de Miami, comenzó a reconvertir antiguos jugadores de fútbol americano y béisbol a puntistas exprés. Todo ello bajo supervisión del expuntista e intendente del frontón de Miami, el lekeitiarra Juan Ramón Arrasate.

Pero eso sí, el recinto previsto no será de 54 metros sino de 36. Tampoco será de piedra o cemento como es costumbre puesto que tanto el frontis como el rebote serán de cristal templado de 20 milímetros de grosor, dejando que la pared izquierda se construya de un material polimérico. Este diseño viene avalado por el expuntista Iñigo Kalzakorta, originario de Markina. ¡¡¡Suerte en la aventura!!!

Another «Brickell» in the Mall

La margen sur del río Miami esconde en la actualidad el gran pulmón financiero del estado de Florida, encuadrado en el distrito conocido como Brickell. Y recibió dicho nombre por la pareja de pioneros William y Mary Brickell que en 1870 tuvo la visión de montar casa y tienda en aquellas tierras que antaño fueron el hogar de los indios de la tribu tequesta.

Fue tal el impacto de su actividad económica que en 1896 atrajo la llegada del ferrocarril al lugar, lo que definitivamente catapultó su despegue como tierra de oportunidades. El polo donde se concentra la máxima expresión, hoy en día, del «must be» empresarial de dicho distrito es la Avenida Brickell donde se pueden encontrar numerosos organismos y delegaciones de entidades.

El Tomoscopio de Mimbre utilizó este escenario para el desarrollo de algunos momentos importantes de la novela.

Todavía colgados con Calvi

Roberto Calvi

¡Su cara no presagiaba nada bueno!

Ayer, en El Tomoscopio de Mimbre se hizo mención a un famoso puente de Londres, el de BlackFriars. En esta entrada se relataba telegráficamente un suceso que conmovió al mundo como fue la aparición del banquero italiano Roberto Calvi, con una soga al cuello, colgado del mismo.

Un hombre de la confianza absoluta del Vaticano, no en vano estuvo al cargo de las finanzas del IOR (Instituto de Obras para la Religión), eufemismo para no llamarlo Banco Vaticano. Hasta que, espeluznado por determinados movimientos que se realizaban con esos dineros, quiso informar del descalabro al que se abocaba la institución de continuar por esa senda.

Y ahí comenzó su «calviario». Huído de Italia, recorrió no pocos lugares hasta llegar a Londres al saber que su vida pendía, a partir de ese momento, de un hilo. Profética metáfora que se vería superada sólo por el grosor de la cuerda.

Tal día como hoy, treinta y cuatro años después de aquello, todavía sigue coleando el asunto en los juzgados italianos, enmarañado por todo tipo de argucias procesales y con sus hijos fuera del país aún.

blackfriarsbridge

Los Uros y sus casas flotantes

Mapa del Lago TiticacaUna entrada publicada hace un mes, dejó a más de un lector con la boca abierta al comprobar la magnitud del proyecto de ciudad flotante Freedom Ship retomado a lo bestia después de venirse abajo tras un huracán y los atentados del 11-S en 2001.

Esto tenía su enganche con un pasaje de El Tomoscopio de Mimbre sucedido en el lago Titicaca en el que el protagonista es invitado a pernoctar en una de las casas flotantes en los que la etnia Uro lleva habitando desde hace siglos.

Estas casas que pueden verse en la siguiente imagen, no andan exentas de su ingeniería. Sin conocerla de nada, estos nativos desarrollaron un sistema parecido al utilizado en la ciudad de Venecia. Más que nada para evitar aparecer por la mañana en medio del lago a la deriva.

Etnia Uros en el lago Titicaca

Mientras tanto en los EE.UU., ciertas mentes han decidido seguir dando vueltas a la idea y ya hay diseños salidos de algunos estudios de ingeniería con esta pinta y con papeletas de surcar en no mucho los océanos del mundo. Y como siempre los hay que ya están pensando en travasar ciertos paraísos fiscales a estas plataformas flotantes para continuar con el actual «mamoneo» financiero mundial.

barcos isla