Capital y ciudad más grande del Departamento con igual nombre, constituye un enclave de grandes contrastes. La base de su pujanza económica descansa sobre una ancestral tradición de inversiones industriales unida a una poco productiva pero abundante población de corte agrícola y ganadero, a la que ha venido a completar a lo largo de la última década el bestial repunte del negocio inmobiliario.
Las imágenes que ilustran esta entrada son una buena muestra de esto, al mostrar desde el Arequipa más urbano y moderno hasta las zonas menos favorecidas. No obstante, su desarrollo actual es imparable.
El Tomoscopio de Mimbre rinde homenaje en sus páginas a esta región sureña del Perú en las personas de unas abnegadas picanteras al pie del volcán Misti. ¿Que no saben qué es una picantería? Pues unos modestos locales donde se elaboran y venden platos picantes (rocoto rellenos, por ejemplo) acompañados de una buena chicha (zumo espirituoso de maíz fermentado, normalmente) y cuyas cocinas tienen la peculiaridad de usar leña como combustible. ¡Algo fuera de serie!