La aparición en la novela El Tomoscopio de Mimbre del personaje de Sara, la española estudiante Erasmus de Biología en Bergen, no fue en absoluto circunstancial. La pretensión era dar un toque, más de alerta que de atención, sobre la progresiva degradación del medio ambiente en nuestro planeta.
Por eso su protagonista persigue en un momento dado de la trama que este personaje, junto a su chico, doctorando de Biología en Barcelona, puedan ambos formar parte de la expedición Malaspina, cuyo objetivo es el estudio del estado de los océanos de la Tierra.
Esta entrada tiene hoy dos dedicatorias especiales: la primera, por celebrarse la Cumbre sobre el Clima organizada por Ban Ki-moon en la sede de la ONU en Nueva York para arrancar un compromiso de los países ante el grave deterioro de las condiciones ambientales del planeta, siendo la segunda de orden más personal al cumplirse el duodécimo aniversario de la muerte de Augusto Tolón, gran defensor del medio ambiente hecho que mereció distinguirse, por parte del ayuntamiento de El Puerto de Santa María, con un pequeño jardín frente al Parque Natural de los Toruños.